Aunque llegar al Teatro Metropolitano no es una tarea fácil, por el tráfico, por la conexión vial a la sede o la distancia, los capitalinos no dudaron en formar parte de la primera presentación de Mark Kadin, el nuevo director de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ).
Apenas quedó una butaca vacía en el recinto, y el concierto fue todo un éxito; terminó con el público de pie ovacionando al músico ucraniano, quien agradeció el gesto con una reverencia, y sin decir una sola palabra, colocó sus manos juntas bajo la mejilla, como en postura para dormir, y se despidió de todos.
Su debut como director titular de la OFEQ inauguró la tercera temporada de conciertos de este año, y lo hizo con un programa conformado por piezas de compositores de Rusia, Austria y Alemania – Shostakovich (Obertura Festiva, op. 96), Schubert (Sinfonía no.5, D. 485) y Mendelssohn (Sinfonía no.4, op. 90)–.
