Con mascarillas de protección y tras someterse a chequeos de temperatura en la entrada, los fanáticos de Harry Potter y amantes de las montañas rusas regresaron a Universal Orlando Resort esta semana en uno de los primeros grandes pasos para reanimar la industria de los parques temáticos en Florida, que quedó temporalmente moribunda ante los cierres para detener la propagación del coronavirus.
Universal Orlando se convirtió en el primero de los grandes parques de esta ciudad en reabrir, permitiendo el regreso de aquellos con pases anuales a sus tres parques el miércoles y jueves, antes de recibir el viernes al público general por primera vez desde mediados de marzo.
“¡Extrañábamos los parques desesperadamente!”, dijo Donna Walters, quien se cubrió la boca y nariz con un pañuelo rosado el miércoles, tras pasar un control de seguridad donde un guardia le tomó la temperatura.
Trabajadores con atomizadores y paños de tela limpiaban los pasamanos de las escaleras mecánicas que llevan a los parques y el Citywalk, el complejo de restaurantes y negocios del centro vacacional que ha estado abierto por más de dos semanas.
El rival SeaWorld Orlando planea abrir la próxima semana, y Walt Disney World espera recibir de nuevo visitantes el próximo mes. Ambos parques temáticos están adoptando protocolos de seguridad similares a los de Universal.