La cantante Adele, de 32 años, y expareja Simon Konecki, de 46, finalizaron su proceso de divorcio luego de estar separados un años y siete meses. Adele y Simon Konecki compartirán la custodia legal de su hijo Angelo, de 8 años y ambos renunciaron al derecho de buscar manutención conyugal.
La expareja usó la mediación para llegar de manera amistosa a los términos de la separación y cualquier problema lo solucionarán sin intervención de demandas. Cabe destacar que Adele y Simon Konecki precisaron que su separación se debió a causas irreconciliables.