La familia es prioridad para Michael Bublé, también su serie favorita.
“Cuando estaba en el estudio, sólo pensaba en terminar rápido para regresar con mi esposa y mis hijos, ¡y para terminar de ver los episodios de Luis Miguel: La serie”, dijo entre risas el canadiense, en entrevista vía Zoom con Excélsior.
No se le quita el fanatismo por la voz y carrera de El Sol de México, pues en anteriores ocasiones ha manifestado su intención por hacer un dueto con él.
“Lo hemos contactado, pero nada. Miren, si se tiene que hacer, se hará, si no a mí me siguen gustando sus canciones. Sería un sueño hacer una canción junto a él”, dijo.
Bublé es de los artistas más buena onda para charlar, porque puede ir de compartir sus gustos en la televisión a contar que, pese a que sus Seahawks no calificaron a postemporada, apoyó a sus rivales de división rumbo al Súper Tazón, los 49s de San Francisco.
Después, vino más de lo bueno: hablar de Higher, su nuevo disco con 13 canciones ya disponibles en streaming, algunas inéditas y otros covers, como My Valentine, donde tuvo la oportunidad de trabajar con Sir Paul McCartney.
“Grabé un demo de su versión y la verdad se lo mandé junto con mi celular, por aquello de que le gustara”, se sinceró. “Y un día iba manejando, sonó el teléfono, contestó y era Sir Paul. Contestarle a McCartney es algo de otro mundo y aceptó producir esta versión.
“Y esa grabación fue la única donde me fui solo, tomé mi tiempo y viví una de las experiencias que todos deseamos vivir alguna vez en la vida”, agregó.
A la lista de deseos sólo sigue pendiente Luis Miguel; Willie Nelson ya fue palomeado al aceptar cantar a dueto el éxito Crazy.
Bublé escribió cuatro rolas para este disco, desempolvando esa habilidad que pocos le reconocen, pues su fuerte es esa voz barítona que lo acerca a apodos relacionados a Frank Sinatra.
Aunque, sinceramente, él prefiere la traducción de su nombre a nuestro idioma: ¡Miguel Burbuja!
I’ll Never Not Love You, Baby I’ll Wait, Mother y Higher son los cuatro temas coescritos por él.
“Y tratan de todo lo que he vivido estos últimos años, cosas buenas o malas; porque he estado en momentos oscuros y nada felices. Ahora estoy agradecido; las cosas van bien, mis niños están sanos y esto en particular me inspira a ser creativo, no temerle a la vida y dejarme de lo negativo. Quiero expandir, trabajar con quien piense, dejar de ponerme límites”, precisó.
Noah Bublé fue diagnosticado en 2016 con cáncer de hígado. Una situación delicada para él y su esposa Luisana Lopilato, que afortunadamente ha ido viento a favor, de acuerdo con lo poco mencionado por el cantante de 46 años.
A las colaboraciones debemos agregar a Ryan Tedder, de One Republic, el multi nominado productor Greg Wells, y otros colegas que aceptaron las versiones que Bublé tenía preparadas para algunas de sus rolas, como Bob Dylan, el mismo Nelson, y los que preservan el legado y catálogo de Sam Cooke, de quien reversiona Bring It on Home To Me.
“Básicamente traté de llegar lo más alto que he podido estar. Elegí ese nombre por la canción y porque suena genial, pero resume mi hambre por alcanzar lugares nunca explorados, ambiciones, audacias, siempre tratando de crecer y rebasar lo antes hecho, a veces funciona otras no, pero hay que intentar sacar adelante cualquier idea”, dijo.
Bublé fue claro en el tema de invertir más tiempo en su familia que en el trabajo, una decisión que en absoluto ha cambiado ni con la mencionada mejoría en la salud del pequeño Noah de ocho años.