En los últimos años se ha demostrado que revivir a los grandes asesinos de la pantalla grande es bastante favorecedor para los productores, siempre y cuando se trate con el respeto que se merece al personaje principal, además de que siempre serán bienvenidos los que en su momento fueron los héroes o sobrevivientes. Aunque este tipo de regresos a la pantalla grande a veces han resultado un fracaso, cintas como Halloween y Scream dejaron claro que siguen frescas y aún tienen mucho por ofrecer.
Pero Michael Myers y el Ghostface noestán solos en esta ola del resurgimiento del slasher que marcó una pauta importante en el cine, a ellos se une Leatherface, un asesino que ataca en una zona rural de Texas y que tuvo al público al filo de las butacas con La masacre en TeXas en 1974. Luego de contar con una larga franquicia de ocho cintas incluida una historia de origen que pasó desapercibida, esta cinta promete ser fiel a la original además de que será secuela directa de la del 74. Algo que ha identificado a esta historia – como a la mayoría del género – es que el asesino se enfrenta a un grupo de jóvenes en ocasiones hippies que buscan un lugar tranquilo para pasar el rato sin pensar que hay un peligroso hombre cerca que los perseguirá hasta atraparlos y torturarlos, pero ahora, aunque siga con aquella línea, Leatherface se topa de frente con una sociedad distinta, que parece menos temerosa y que prefieren grabarlo antes de salir huyendo.
